Llega septiembre y con él, el inicio de un nuevo curso. Además de la vuelta a la rutina, para muchos este año llega un cambio: pasar del colegio al instituto. Es el momento de dejar la niñez atrás y de entrar en esa etapa tan inquieta, revolucionaria y de autoconocimiento que es la adolescencia.
Aquí empiezan a descubrir sus gustos y hobbies, por lo que es el momento ideal para redecorar su habitación o para amueblarla desde cero. Esta deja de ser un lugar para el juego y el descanso y pasa a convertirse en su propio espacio para la intimidad. Un lugar en el que descansar, estudiar, reflexionar, conocerse y dejar volar los sueños.
Tiene que ser un dormitorio con unos muebles funcionales y con mucho espacio de almacenaje. Lo ideal es encontrar un conjunto de líneas simples y un poco vanguardista, para que ellos puedan decidir el estilo y adaptarlo añadiendo la decoración a su gusto: color de pared, lámparas, cuadros y ropa de cama. En nuestro catálogo podrás encontrar una amplia selección de dormitorios juveniles con todo tipo de disposiciones y combinaciones de colores, que también son un buen punto de partir por el que empezar a dejarles tomar decisiones en decoración.
Como padres y tutores, nos puede resultar un poco difícil el ver como los pequeños crecen, pero hay que aceptar este cambio e involucrarnos en él para ver con sorpresa en ocasiones, pero siempre con orgullo, como conforman y cambian sus gustos, aficiones y su manera de expresarlos. En definitiva, cómo empiezan a andar por la senda que los llevará al mundo adulto como seres únicos e independientes.
Permitirles tener un refugio propio adaptada a sus idas y venidas en gustos, es uno de los mejores regalos que podemos hacerles, aunque, con tanta hormona trastocada, les cueste unos pocos años reconocer lo que hemos hecho por ellos.