El invierno parece que nos abandona, y no solo por las fechas, sino porque las temperaturas empiezan a subir y el sol se asoma ya en muchos lugares de España, sin ninguna timidez.
La decoración primaveral tiene la capacidad de elevar el ánimo e inyectar a los espacios una dosis de energía extra. ¡Llega el momento de quitar las gruesas alfombras!
Abre las ventanas y deja que el sol llegue a todos los rincones y demuestre su capacidad para dar alegría y lanzar rayos de vitalidad. Para potenciar la luminosidad y sus beneficiosos efectos, opta por una decoración más ligera, que refresque y baje los grados con su sola presencia.
“Qué verde está todo”. Esa es la sensación que debes tener en tu casa estos meses. Contágiate del paisaje exterior y coge prestado la belleza, frescura y vitalidad de las plantas y flores.
La primavera es color, por eso no tengas miedo a usarlo. Las más atrevidas pueden optar por tonos ácidos, una inyección de vitamina, o por colores intensos, como azules, rojos o amarillos, llenos de fuerza visual. Mientras que si tu atrevimiento tiene un límite, rodéate de crudos, neutros y pasteles. Son tremendamente cálidos y refrescantes.
Con ‘swing’ femenino. Los estampados florales y el color rosa en todas sus versiones y aplicado tanto en objetos como paredes y telas forman parte del universo decorativo femenino.
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- Cambiar ropa (edredones, mantas…)
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- ¡Es hora de abrir las puertas!
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- Efecto bandeja, sirve agua en una bandeja
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